Informe Pyme 2022: Digitalización y desarrollo sostenible en la pyme en España es un estudio empírico elaborado a partir de la información proveniente de una encuesta realizada a directivos de 1.044 pymes españolas, con el objetivo de conocer el grado de digitalización de las pymes, los factores que la impulsan y sus barreras; así como el comportamiento de las pequeñas y medianas empresas ante las diferentes medidas de sostenibilidad de los negocios, los beneficios derivados de las mismas y los obstáculos para conseguirla.
En cuanto a la digitalización, el Informe pyme 2022 recoge información sobre el nivel de adopción de equipamientos tecnológicos (básicos y avanzados) por la pymes españolas. Dentro del primer grupo (básicos), el nivel de adopción es el siguiente: Banca digital (97,2%), web propia (87%), ciberseguridad (78,4%), sistemas integrados de gestión (53,3%), teletrabajo (49%), redes sociales con fines comerciales (48,7%); lo que supone una media de disponibilidad de equipamientos básicos por parte de las pymes del 68,9%. Dentro del segundo grupo (equipamientos avanzados), el nivel de adopción es el siguiente: Intranet corporativa (33,1%), Big Data y software de análisis de datos (29,7%), localización e internet de las cosas (21,1%), portal propio de ventas (19%), robotización y sensorización (18,3%), comercio electrónico marketplace (8,4%); lo que supone una media de disponibilidad de equipamiento avanzados por parte de las pymes del 21,6%. Entre las barreras para la transformación digital, las pymes encuestadas destacan dos: los altos costes de inversión y la falta de personal cualificado.
Con respecto a la sostenibilidad, las pymes realizan de manera generalizada la gestión de residuos y se percibe una elevada sensibilización con la gestión de envases plásticos y derivados. La aplicación de criterios para la gestión energética es menos habitual. Los beneficios percibidos son la mejora de la imagen y la reputación de la empresa, y el aumento del grado de satisfacción de los clientes. Sin embargo, implementar el desarrollo sostenible les resulta demasiado costoso y consideran que la normativa es compleja de aplicar. También encuentran dificultades para financiar este tipo de proyectos.
Para el presidente del Consejo General de Economistas de España (CGE), Valentín Pich, “este informe refleja de manera clara y concisa cuál es la situación real de las pymes españolas en cuanto a estos dos importantes aspectos –digitalización y desarrollo sostenible–, gracias a lo cual pueden observarse sus virtudes o desequilibrios; de esta forma, desde el CGE se proporciona una herramienta para la planificación de las estrategias a seguir, tanto para la gestión de la empresa como para dirigir convenientemente los programas de actuación de las políticas públicas, siendo útil para las pymes y para los distintos agentes económicos y sociales, facilitando información para la toma de decisiones”.
En cuanto a la digitalización de las pymes españolas y tras analizar los resultados de la encuesta a este respecto, Pich, ha afirmado que “aún nos queda mucho camino por recorrer y no podemos permitirnos quedarnos atrás, ya que la competitividad y productividad de nuestra empresas y de nuestro país pasa necesariamente por la digitalización”. Por ello, el presidente de los economistas animó a las pymes españolas “a aprovechar los fondos europeos de recuperación Next Generation EU en este ámbito, fundamentalmente las ayudas para autónomos y pymes del programa Kit Digital.
En la presentación del Informe han participado Valentín Pich, presidente del Consejo General de Economistas de España (CGE); Salvador Marín, presidente EFAA for SMEs, director del Servicio de Estudios del CGE y coordinador del “Informe pyme 2022”; Francisco Manuel Somohano, coordinador del “Informe pyme 2022” y director del Equipo de Investigación de la Universidad de Cantabria de FAEDPYME, y Domingo García Pérez de Lema, coordinador del “Informe pyme 2022”y director general de FAEDPYME
Salvador Marín, Francisco Manuel Somohano y Domingo García han señalado que “según la encuesta, las expectativas del 2022 en generación de empleo ofrecen una tendencia algo más favorable, aunque con un comportamiento dispar según el tamaño analizado. La diferencia entre las pymes que opinan que disminuirán el empleo y las que lo aumentarán (saldo de expectativas), pone de manifiesto que el tamaño es un factor clave. Así, cuanto mayor es el tamaño de la empresa mayor es su saldo de expectativas. De esta forma se puede apreciar que las microempresas presentan un saldo positivo de 11,5 puntos, mientras que las empresas medianas sitúan su saldo de expectativas de empleo en 30,8 puntos; y, en esta ecuación, el ser más digital y sostenible medioambientalmente ayuda al crecimiento y por tanto al empleo”.
Por último, Marín, Somohano y García han señalado que “entre los aspectos en los que las pymes españolas consideran que tienen una mejor posición con respecto a la competencia están la satisfacción de los clientes, el menor grado de absentismo laboral, la calidad de sus productos y la satisfacción de los empleados; por el contrario, son susceptibles de mejorar la rentabilidad obtenida y la rapidez en el crecimiento de las ventas. Concretamente 2021 supuso un punto de inflexión ante la crisis originada por la COVID-19 y ha conllevado un lógico aumento de los ingresos en muchas pymes en España, aunque quizás no con la rapidez e intensidad deseada acorde con periodos prepandemia. Así, solo el 53,2% de las empresas encuestadas señala que ha aumentado sus ventas en 2021 con relación a las registradas en 2020, mientras que el 34% consiguió mantenerlas y un 12,8% las redujo. En este contexto se preguntó a los encuestados sobre las expectativas de ventas para el 2022 y 2023. Se aprecia que las expectativas siguen la línea anterior para los dos años. Así, continúan en torno a un 48% de las pymes que en 2022 (49,4% en 2023) esperan aumentar sus ventas, mientras que prevén que sus ventas disminuyan un 5,8% de las empresas en 2022 (5,3% en 2023)”