Tras anunciarse el final de la emergencia sanitaria, el teletrabajo se ha quedado en el mundo empresarial como una modalidad de empleo que las compañías ofrecen a su capital humano, con el objetivo de mejorar su calidad de vida y aumentar así la eficiencia en el desempeño de sus funciones laborales.
Durante la pandemia, 7 de cada 10 empresas pusieron en marcha alguna fórmula de teletrabajo o trabajo híbrido, según un informe de la consultora PwC. Algo inédito en un país como España, donde la presencialidad siempre ha tenido mucha fuerza en el mundo laboral, pero que, ahora, se ha desvanecido: el 81 % de los trabajadores españoles manifestó su voluntad de seguir teletrabajando después de la pandemia al menos dos días a la semana.
Sin embargo, el teletrabajo puede conllevar riesgos dentro del ámbito digital, un peligro que se encarga de recordar el “Día de Internet”. Una celebración que cada 17 de mayo promueve la inclusión digital, la innovación tecnológica y el uso seguro y responsable de Internet. Por este motivo, SPC, la marca española de electrónica de consumo, ha recopilado una serie de consejos que harán que cualquier persona que disponga de esta fórmula laboral pueda teletrabajar sin riesgos y con la confianza de hacerlo bajo un marco de seguridad y eficiencia.
1. Utiliza extensores y Wi-Fi 5 GHz para una conexión veloz y sin interrupciones
A la hora de teletrabajar es imprescindible contar con una conexión a Internet rápida y estable con el fin de mantener una comunicación fluida con los compañeros de trabajo y clientes de la empresa. Para ello, el uso de extensores de Wi-Fi mejora la señal de Internet para que llegue a todos los rincones de tu hogar, lo que beneficiará a la conectividad de los dispositivos. Asimismo, a la hora de elegir los gadgets tecnológicos para la “oficina en casa”, es aconsejable elegir aquellos que dispongan de conexión Wi-Fi de 5GHz, para optimizar al máximo la velocidad de Internet para teletrabajar.
2. Configura un espacio de trabajo que facilite la portabilidad
Para crear el lugar de trabajo ideal en casa, adaptado a las demandas de los entornos híbridos, es imprescindible acondicionar el espacio mediante dispositivos que promuevan la portabilidad. Es el caso de la tablet, una “herramienta” que ofrece el rendimiento necesario para poder gestionar los proyectos desde cualquier lugar, sobre todo si estás fuera de tu domicilio habitual, como una segunda residencia. Existen modelos de tablet más avanzados en almacenamiento y RAM que además están perfectamente equipados con funciones que benefician la movilidad. Como son la incorporación de un lápiz óptico para hacer anotaciones sobre la marcha con total comodidad, además de opciones de conectividad para adaptarse a cualquier situación y una batería capaz de aguantar un día entero de trabajo.
Por otro lado, para elegir los dispositivos para teletrabajar, tenemos que conocer primero nuestras necesidades y adquirir todo lo necesario para la ergonomía y la “multitarea” en el espacio de trabajo, tales como sillas ergonómicas o Docks de carga, transferencia de datos y conexión a internet vía Ethernet. Esto nos permitirá trabajar de forma más eficiente, tener un espacio de trabajo ordenado y ergonómico, y con la certeza de poder configurar el espacio adecuadamente para obtener de ellos todo su rendimiento.
Asimismo, para garantizar la seguridad de nuestra información, se recomienda disponer de equipos específicos para teletrabajar diferentes de los que utilizamos para ocio o cuestiones personales. Aparte de ser más eficiente, ya que no llenaremos los ordenadores con información de ambos entornos, es más seguro en caso de vulneración de algún equipo.
No obstante, a veces podremos disponer de dispositivos que utilicemos en casa tanto para ocio como para trabajar, como pueden ser un monitor smart con sistema operativo Android, que servirá tanto para conectar el ordenador como para disfrutar de momentos de ocio gracias a su capacidad para instalar apps de streaming directamente desde la Play Store del dispositivo. Una opción perfecta para todo lo que necesitemos en cada momento del día.
3. Las soluciones cloud, una utilidad tan esencial como la oficina
Ya no se conciben los espacios de trabajo sin disponer de un lugar en la nube donde alojar los distintos documentos que se trabajan. Sobre todo, porque en la modalidad del trabajo híbrido, vamos a tener que acceder a esa información desde diferentes lugares, y no podemos cargar con pesados dispositivos de almacenamiento, que además se pueden extraviar con facilidad.
El uso de servicios basados en la nube para compartir, almacenar y colaborar en documentos y proyectos es una de las mejores opciones para teletrabajar, ya que permite que todos los miembros del equipo accedan a la información desde donde estén en cada momento. Los dispositivos de trabajo más habituales, como los ordenadores portátiles o las tablets, facilitan el acceso y trabajo en equipo desde diferentes lugares, por lo que son una opción de referencia a la hora de diseñar un plan de teletrabajo.
4. Configura correctamente tus opciones de seguridad y privacidad
El teletrabajo descontrolado, con dispositivos no adaptados al campo profesional, puede poner en peligro incluso la propia viabilidad de la empresa. Por eso, es imprescindible proteger nuestros equipos con recomendaciones básicas como un buen antivirus siempre actualizado. Aquí también entra en juego nuestra capacidad personal para identificar cuándo podemos estar siendo víctimas de una estafa (por ejemplo, al abrir correos electrónicos procedentes de remitentes sospechosos, con la intención de robar nuestros datos o comprometer nuestros dispositivos).
También hay que prestar especial atención a la privacidad, de manera que nuestros datos no puedan ser vulnerados por terceros ni pongamos en peligro nuestra información personal. Y ten cuidado con las videollamadas, ya que, cuando estamos en una reunión desde casa, debemos proteger a otras personas que convivan con nosotros, para que no aparezcan en pantalla (especialmente si son menores). El mejor consejo es disponer de un lugar adaptado a este tipo de reuniones a distancia, donde nadie pueda molestarnos, hacer ruido o aparecer por sorpresa en cámara. Si además utilizamos una webcam externa, podremos orientar mejor el encuadre para evitar que enfoque a zonas de la casa que no queramos mostrar. Tampoco dejes micrófonos abiertos, ya que podrían jugarte una mala pasada.
5. Utiliza la técnica Pomodoro para el seguimiento del tiempo y las tareas
Cuando teletrabajamos, los tiempos se diluyen. Y es que no es lo mismo trabajar en una oficina una jornada de 8 horas con una hora de inicio y de final que fusionar el horario laboral con el resto de nuestra jornada. Aunque no lo parezca, el mero hecho de eliminar la necesidad de cambiar de escenario (de casa a la oficina, y viceversa) supone una barrera que establece límites a nuestro día. Algo que no existe al teletrabajar, motivo por el que muchas personas terminan realizando jornadas más extensas y caóticas, sin horarios de ningún tipo.
Para evitar que nuestra jornada sea un caos, se recomienda el uso de herramientas o apps de seguimiento para monitorizar el progreso del trabajo y asegurarse de estar en el camino correcto con las tareas y proyectos. Además, si quieres ganar eficiencia, la técnica Pomodoro te permitirá estructurar la jornada en periodos de trabajo de 25 minutos seguidos por descansos de 5 minutos, que ayudan a desconectar y relajarse. Se te hará la jornada más corta; pero, sobre todo, verás que ganas eficiencia.
Además, se recomienda eliminar todos los ‘ladrones de tiempo’ que nos rodean en el mundo digital: en los dispositivos para teletrabajar, solo deberías tener instalados aquellos programas y aplicaciones que sean necesarios para tu trabajo. El resto solo supondrá una carga para nuestro equipo y nuestra concentración, ya que puede afectar negativamente a nuestra productividad.