Hablamos de servidores cloud o en la nube. Hoy resulta realmente sencillo encontrar VPS económicos a partir de empresas especializadas como Ionos.
Simplificando, podríamos decir que se trata de un sistema de registro y distribución de información que no se basa en soportes físicos, a pesar de que ofrezca las mismas prestaciones que las tecnologías convencionales. En la actualidad, podemos encontrar nubes públicas, nubes privadas o una mezcla de ellas. La efectividad de esta tecnología queda puesta de relieve en servicios tan populares como, por ejemplo, Box, Dropbox o Google Drive. En realidad, la mayoría de proveedores y empresas han hecho una transición y operan a partir de servidores en la nube. Algunos otros ejemplos son las aplicaciones que utilizamos, prácticamente todas requieren de espacios en la nube para funcionar. No obstante, el grado de profesionalización que ha alcanzado este segmento queda especialmente patente en la proliferación de los servidores virtuales, es decir, los servidores en la nube o los servidores cloud.
A la hora de contratar un servidor dentro de una compañía de hosting podemos identificar diferentes variedades. Las tres tipologías más comunes son los servidores dedicados, los servidores cloud y los servidores virtuales.
Los servidores dedicados hacen referencia a una variedad física, ubicada en las instalaciones de una empresa. Los servidores virtuales o VPS están por su parte compuestos por una estructura física dividida en diferentes partes que adquieren la función de entornos virtuales independientes entre sí. Cada uno de ellos actúa como un servidor y puede cubrir las mismas funciones que cubren sus análogos clásicos. No obstante, en este caso, se trata de una fórmula de hardware compartido, lo cual resulta especialmente económico.
La última evolución en el segmento llegó de la mano de los servidores cloud. Se trata de máquinas virtuales hospedadas dentro de servidores físicos. Con un único servidor es posible obtener varios servidores cloud distintos y completamente independientes entre sí. Además, uno de sus principales puntos fuertes es que proporcionan un entorno más seguro debido a la propia naturaleza de las máquinas virtuales.
Los servicios cloud están configurados para tramitar contrataciones en función de las necesidades de cada empresa o cliente. Este servicio permite escoger los recursos necesarios así como su ampliación a medida que se requieran de mayor potencia, capacidad a nivel de procesamiento o almacenamiento.
Las garantías que proporcionan en materia de seguridad son más elevadas en comparación con las soluciones más tradicionales. Se trata de unidades blindadas y estancas. Además, al estar basadas en software son más sencillas de poner en funcionamiento y permiten la realización de copias de seguridad en distintos servidores físicos. De este modo, en caso de que se produzcan incidentes como caída o errores técnicos, es posible acceder a la información de forma prácticamente instantánea, y sin que ello conlleve vulnerabilidades o riesgos de pérdida de información.
Servidores en la nube: Una solución con altas garantías en materia de seguridad
Sus mayores prestaciones en el ámbito de la ciberseguridad constituyen una las principales razones del éxito que han experimentado los servidores cloud durante la última década. Su naturaleza proporciona un contexto de protección más sólido en un punto en el que se multiplican las amenazas en el ecosistema digital. Algunas de sus potencialidades más destacadas son:
-
Seguridad perimetral
Constituye uno de los elementos básicos a la hora de construir un centro de datos. Aunque algunas empresas suelen destinar cierto presupuesto a esta finalidad, en general, dentro del ámbito de las pequeñas o medianas empresas suele ser insuficiente. A menudo, estos modelos de negocio tienen acceso a firewalls con prestaciones bastante limitadas y, en su mayoría, cuentan con restricciones para actualizarlos con la periodicidad que se requeriría. Sin embargo, la contratación de un servicio de servidor en la nube mediante un proveedor especializado integra en su core de negocio la prestación de servicios de TI. En consecuencia, tanto el funcionamiento como la seguridad de los entornos pasa a convertirse en algo prioritario dentro de su modelo de negocio, por lo que una de sus prioridades es una fuerte inversión en ello con las garantías indirectas que ello conlleva para sus clientes.
-
Detección de intrusiones
Algo muy parecido ocurre con los sistemas de protección ante agresiones o accesos no autorizados. La mayoría de empresas no tienen los suficientes recursos ni la capacidad de inversión para integrar los mejores requeridos en servidores propios.
-
Accesibilidad y redundancia
La redundancia intrínseca dentro de la tecnología cloud multiplica las garantías de conservación y proporciona un mayor alcance en términos de almacenamiento. La posibilidad de llevar a cabo copias de seguridad o acceder a los contenidos limita las posibilidades de que se puedan ver comprometidos los datos de la empresa o que estos escapen al control de sus legítimos propietarios.
-
Garantías en el ámbito de la legalidad
El cumplimiento normativo y legal requiere de la posesión de certificaciones como la ISO/IEC 27001, la ISO/IEC 22301 o la RGPD (Protección de Datos). Los proveedores de servidores cloud proporcionan este tipo de certificaciones con las implicaciones que ello tiene en la operatividad de las empresas.